lunes, agosto 28, 2006

Soledad

No todos los días la tengo, pero cuando se presenta ante mi es de un color oscuro, intangible, asfixiante, con resquisicios de incertidumbre, con aroma a olvido...como las nubes que se ciernen grises sobre la ciudad presagiando una tormenta.

No todos los días la tengo, pero cuando se presenta ante mi es un vacío, un agujero que absorbe todo calor, dejando a mi alrededor fríos témpanos de tristeza, una helada escarcha que crea un blanco desierto de melancolía.

No todos los días la tengo, pero cuando se presenta ante mi es un huracán de sentimientos, es pena, es tristeza, es desamor y es abandono. Es silencio, oscuridad y frio. Es una helada corriente que te arrastra bajo, muy bajo, siempre abajo.

No todos los días la tengo, pero cuando se presenta ante mi siempre aprovecha, amigos, vuestra ausencia, vuestra falta. Es una cobarde que no se atreve a presentarse con vosotros. Pues sabe que será derrotada y olvidada. Pues sabe que su frio no puede competir con el calor que me dais. Pues sabe que su debilidad no es rival para la fuerza que me transmitís.

No todos los días la tengo, pero hoy, SI.

0 comentarios:

Publicar un comentario

Suscribirse a Enviar comentarios [Atom]

<< Inicio